Eres igual a ti, y desigual, lo mismo que los azules del cielo.

Juan Ramón Jiménez


martes, 28 de junio de 2011

AGUA TIBIA BAJO UN PUENTE ROJO





Cartel de la película Agua tibia bajo un puente rojo




Mis entrañas se hacen agua
cuando me acuerdo de nosotros
Como en aquella película japonesa
“Agua tibia bajo un puente rojo”

Mientras me hago la manicura
(ejem)
contemplo en éxtasis
como se desliza el regato
que brota humeante por entre mis piernas

En su camino se abren las flores
Esparce esquirlas de sol sobre la hierba
Viste los campos de nueva primavera
Y en él se detienen a enjuagar  sus picos las aves
Y su sed

En ese océano que conforman mis aguas
hemos sido buceadores
violentas bestias submarinas
estrellas de los cielos arrojadas al mar
cuando la noche se sacude entre sueños

Nos hemos sentido ligeros
cuanto más nos atraía la gravedad
Hemos engullido la carne del otro
durante el  ayuno prolongado de cuaresma

Tu decías ser Moisés
huyendo de los egipcios
Y con tu cayado lograste
que tu pueblo penetrara sin víctimas
el mar vivo de mis aguas

Ahora como la biblia escribe
tocan años de larga travesía por el desierto

Entretanto yo espero en mi jardín
mientras me hago la manicura
y contemplo en éxtasis
como el agua tibia que corre entre mis piernas
cual río revuelto
se desliza hasta atravesar el límite del puente rojo
Para encarar esa hermosa utopía
de inundar el desierto con mis océanos



34 comentarios:

Darío dijo...

Evidentemente, estás hecha de agua, y no lo discuto, así lo habrá dispuesto el señor, pero, cuál habrá sido la gota que rebalso el el vaso?

En mi propia tinta dijo...

Uf mujer!qué sos intensa.
Muy bello

Laiseca Estévez dijo...

BUENO BUENO.... ¡¡¡ QUÉ FUERZA!!!
violentas bestias submarinas...
deja algo de desierto y océano para las demás, que quieres acapararlo todo...

fiorella dijo...

Me gustan mucho tus poemas.Un beso

El hombre de Alabama dijo...

Ejem. Ejem. Ejem.

silvia zappia dijo...

visual poema! te veo hasta haciéndote la manicura (ejem)=genial!

y no sé por qué no vi esta película...no me lo perdono.
y tus imágenes me recordaron a kawabata.

besos*

vera eikon dijo...

Buena pregunta, Darío. Buena pregunta....

vera eikon dijo...

Lobamarino, todos somos intensos, pero la diferencia es que no me lo callo. Biquiños!!!!

vera eikon dijo...

Laiseca, lo bueno de los desiertos y de los océanos es que hay para todos. En ocasiones son simplemente un pequeño palmo de carne, y de goce. Bicos queridiña

vera eikon dijo...

Alabama....

vera eikon dijo...

Gracias Fio. Un beso grande!!!

vera eikon dijo...

Rayuela, ayer por la tarde le comentaba a alguien acerca de una película coreana "Mentiras" que narra una relación sadomasoquista entre una joven y un hombre casado. Y no sé por qué recordé esta otra película "Agua tibia bajo un puente rojo" que había visto durante la misma época, y que me había encantado. Curiosamente apenas la recordaba, pero me percaté de que tenía mucha relación con mi relato "El Zahorí" y la teoría que en él se desarrolla y que se centra en los manantiales subterráneos. Por lo que hoy, al levantarme, me sobrevino este poema. Y bueno, lo de la manicura(ejem)
Besos Silvia!!!

çç dijo...

Muy bien, ya te he mencionado mi sorpresa al leer tus poemas. Sobre todo por la musicalidad, el arroyo se escucha perfectamente. Hoy mientras bajaba con la bicicleta me vino la palabra prosodia a la cabeza y empecé a buscarle conexiones e inevitables definiciones. Al parecer es algo así como el significado cuando quedamos sordos ante la idea de la palabra pero aguzamos la idea de su música. Verás, yo al acabar el poema escuchaba perfectamente tus uñas triscadas por un cortauñas, claro que luego....

vera eikon dijo...

Daniel, ya me has hecho reir. Mis uñas cortadas por un cortauñas????Por otro lado me encanta la definición que haces de prosodia. Y sí, ahora sé que para mí es lo fundamental al leer un poema. Esa musicalidad que transciende el significado, y en cierto modo lo envuelve y lo comprende. Que provoca que un poema furioso, nos muestre la furia, incluso antes de que cataloguemos las palabras de furia. Y si es de esperanza, nos inunde el corazón con esa luz, antes de que incluso hayamos entrevisto la vela. Por cierto, recordarás que la película la vimos juntos en el Adega. Lo mismo que la de Mentiras, con cuyo visionado me torturaste...

çç dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
çç dijo...

Soy consciente de las torturas. Existen casos, personas que se quedan sordas con diez años pero educaron su oído musical con anterioridad y por extraña razón son capaces de interpretar sin escuchar. La mística de la música es ahí donde no llegan las palabras. Aunque contrariamente, es gracias a las palabras, porque tienen armonía e inflexiones que estamos capacitados para entender la música, entendemos la música por las palabras que se repiten con esa unidad deliberada. Espero poder aportar siempre algo interesante a tu Kibbutz. Bico.

vera eikon dijo...

CC ya sabes, todo tú eres interesante, o como mínimo pones una necesaria nota excéntrica... En esto entreveo que cada vez estás más de mi lado. Porque en realidad la armonía es territorio musical. Y quizás en cierto modo las palabras están musicadas (claro, tienen la misma base que es el sonido, lo que cambia es la conceptualización). Y en sucesión, como pueden darse en un poema, o un relato, constituyen armoniosas melodías. A ver cuándo te vemos el pelo....

Ricardo Miñana dijo...

Precioso poema, un placer pasar por tu casa.
feliz semana.
un abrazo.

Tuky dijo...

"Mientras me hago la manicura
(ejem)" me gustó mucho ese recurso cotidiano y ese ejem que parece un acento, o un Do.

Un abrazo

vera eikon dijo...

Gracias Ricardo. Es bueno que la visiten a una, eso siempre hace que la semana sea mejor...Feliz semana también a ti. Abrazo

Tuky, sí, es un Do. Je....Besos!!!

Darío dijo...

Es verdad, hay algo de Kawabata. Pienso en un arroyo que corre, que vendrías a ser vos, chica de agua, y todas las flores alrededor, los pájaros, los caballos, las vacas, las ovejas, los insectos, las piedras, el viento, el pasto, los árboles, un lobo que se viene acercando, una nube amenazante...ya me hice bolas.

vera eikon dijo...

Pues tendrías que ver la película, porque el arroyo es literal. Comienza a brotar durante el sexo, al principio unas gotas que se deslizan por sus piernas, apenas un hilillo que cae al suelo de madera. Enseguida comienza a espesarse, hervir, revolucionarse, expandirse. Hasta que sale de la casa, recorre el jardín, y llega hasta el puente rojo. Visualmente, una belleza. En cuanto a Kawabata, no sé (soy una desleída). Ya sabes que en el kibbutz tienes libertad para hacerte bolas siempre que quieras....

Crista de Arco dijo...

De una sensualidad impecable!
Además de una intensidad en la descripción de imágenes: pude verlas *

Un beso o 2 #

Darío dijo...

Pos la culpa es de Rayuela, que me hizo acordar de Kawabata, que me hizo acordar de un arroyo, que me hizo acordar de un puente, que me hizo acordar del agua, que me hizo acordar de los peces, y sigue.

vera eikon dijo...

Gracias Eleanor. Supongo que es un texto sensual, y eso de que las palabras se hagan imágenes, es bárbaro!! Más de lo que uno espera cuando escribe...
Bicos

vera eikon dijo...

Anda, Darío, ahora le echas la culpa a nuestra querida Rayuela por hacerte bolas??? Yo pensaba que era un vicio, una adicción que tenías....En mi caso, pienso que si lo es(por cierto que bruto eres. Es lo que pensé ayer cuando leí tu comentario en el post de Laiseca sobre la adicción...)

Aka dijo...

Me ha gustado mucho el poema, eso que soy bastante (por no decir) muy torpe leyendo poesía, pero como ha comentando Eleanor es todo imágenes, como fotogramas que se despliegan dejando ver lo que hay más allá de ellas, lo que no aparece en las imágenes. Precioso, igual que la película, que vi hace muchos años junto a otra coreana (La isla) de mucha más crudeza.

Gracias por el comentario en mi entrada, me gustó leerlo.
Un abrazo.

Erev dijo...

Vaya, al principio de leer tu poema sólo tenía ganas de ver esa película que, soy sincera, desconocía.
Tras leer los comentarios ya no es interés, sino arrepentimiento y acidez por no haberla visto.
Gracias, por supuesto, por las tres cosas.

vera eikon dijo...

Sí Aka, esta película es de las que te dejan buen sabor, como un bonito cuento. La otra de la que hablas no la vi. Pero parece una buena combinación, crudeza con un punto de ternura. Me gustó mucho el blog. También leí el relato sobre el infinito, pero iba a caer en un lugar demasiado común en mi comentario, así que pasé sin firmar...
Un abrazo

vera eikon dijo...

Erev, la verdad es que hace tantos años que vi la película que conservo muy tenues las imágenes, como si pertenecieran a un sueño. Pero eran muy bellas, de colores vivos, y un punto de magia. Es curioso que después de tanto tiempo, fueran el punto de partida de un poema....
Besos!!!

Mixha Zizek dijo...

Me gusta mucho este poema, me gustan las imágenes que prsentas en tus versos, es sensual y apasionado. Puedo visualizarlo, en especial la última parte, besos

José Antonio Fernández dijo...

Vaya, Vera. Que poemazo!! Desprende mucha sensualidad. Me gusta esa forma de mezclar algo tan trivial com estar haciendose la manicura con la explosión sensual que tiene el poema.
Los dos últimos versos son preciosos.
Un abrazo!!

vera eikon dijo...

Mixha, me encanta que me digas que visualizas el poema, esa es la auténtica aquimia del verso. Como dije arriba, cuando las palabras se hacen imágenes....Besos

vera eikon dijo...

Me alegra que te guste, José Antonio. Lo de la manicura (ejem) no sé cómo se ocurrió, quizás buscaba una forma sutil para poner en situación el poema. Y los dos últimos versos, son la esperanza, en esa frenética carrera del querer
Abrazo