Eres igual a ti, y desigual, lo mismo que los azules del cielo.

Juan Ramón Jiménez


miércoles, 21 de diciembre de 2011

DESPRENDIMIENTOS

 




      I     


Violentarnos el corazón
hasta escanciar el beso
y que el amor caiga a plomo




 Sophie Thouvenin



II

Brujuleo en la palabra
Torna la imagen
en pájaros desnudos,
hojarasca del alma
Imperios caen


12 comentarios:

Stalker dijo...

poemas que juegan en el límite, entre la gravedad y la gracia... se escoran hacia el cuerpo, hacia la intimidad de las formas sensibles, y prosiguen allí su vida secreta, pronunciándonos con su brasa o su lentitud

tanta vida en esa hojarasca, tanta carencia que hace cuerpo su voz en la ternura...

un abrazo

Blue dijo...

Ufff...hasta escanciar un beso y que caiga dentro del corazón hay que ensayar y derramar mucho por fuera.
Bicos, Vera.

vera eikon dijo...

Escorarse según ese viento que nos sopla por dentro. Algunas veces corcel del cielo, vapor que sueña ser lluvia. Otras nos anclará a nuestra carne, amarras en la periferia y en los epicentros del cuerpo,jadeos hasta en las aristas. Escribir de ese modo. Un roce. Una caída de alas. El sueño en la mirada del niño. Brizna.
Un abrazo, Stalker (tus comentarios siempre son el origen de un temblor)

vera eikon dijo...

Pues no nos rindamos, Blue. Ensayémoslo muchas, muchas veces. Sólo el derrame ya merece la pena. Bico hata Pontevedra..

Darío dijo...

Hay una especie de búsqueda oriental en todo esto.

Darío dijo...

Me gusta, digo.

El Poeta Maldito dijo...

Una violencia peculiar rodean los dos textos.

Me encantan.

Eleanor Smith # dijo...

Los pájaros. Siempre.

Me gustan ambos, pero el segundo poema me conmovió.

Un beso o 2 #

vera eikon dijo...

No sé si existe búsqueda, Darío(para mí escribir es algo que se mueve por dentro y ni me cuestiono. Además en esto soy terriblemente voluble, cero carácter.No puedo vanagloriarme de ir en una dirección)Sólo siento que necesito deshacerme de lo accesorio, reducir el gesto a lo mínimo imprescindible. O quizás todo esto es una excusa para volverme cada día más vaga, y ya no consigo escribir un mísero relato. Y esto, en cierto modo, me preocupa(pero a mi manera de preocuparme de las cosas, un poco de refilón, y sólo me acuerdo cuando hablo de ellas). Me gusta que te guste.

vera eikon dijo...

Me gusta eso, Poeta Maldito. Mi temor sería que resultaran tibios o neutros. Un abrazo

vera eikon dijo...

Los pájaros no pueden faltar, Eleanor. Bicos!!!

Axis dijo...

Desprendimientos verdaderamente bellos, muy bellos Vera...

Beso (intenso de sonrisa)