Eres igual a ti, y desigual, lo mismo que los azules del cielo.

Juan Ramón Jiménez


jueves, 21 de noviembre de 2013

COLISIONES



Imposible atajar el paso
de la brisa tornándose viento
el amor siempre se aproxima
por el ángulo muerto del corazón

11 comentarios:

Isabel Martínez Barquero dijo...

Me gusta ese contraste o, mejor, esa yuxtaposición entre el viento imparable y el amor que se hace dueño de un espíritu. Estamos sin defensas ante ambos.
Un besote, querida Vera.

Blue dijo...

...para matarlo una y otra vez.

El corazón debe ser el único órgano que tiene varias vidas.

Bicos.

lichazul dijo...

punto ciego se hace cuando el amor todo lo cubre
somos víctimas a mansalva

besitos

P. dijo...

Ojalá tuviera más ángulos muertos. Y esquinas. Y rincones.

Sandra Garrido dijo...

con tantas tiritas y aun así se desangra, y al final lo a-corazonamos, libre para amar y libre para doler y con los retrovisores puestos

besos

Carmela dijo...

Allí donde no estamos protegidas, :)
Un beso, Vera

Juan A. dijo...

Esas son las cosas que nadie nos enseña a tiempo. Salvo tú.

Sarco Lange dijo...

Hablar de amor a estas alturas debe ser como cuando se desvirtúan los amuletos.

No sé.

Un beso Vera.

Axis dijo...

Por aquí está todo muy quieto ;)
Oh! esa brisa y ese viento... y ese corazón!!!

Bicos hermosura

Leo Mercado dijo...

Hay que dejar hablar al viento, nomás...

Darío dijo...

El amor es una Mesías, Corazón Lázaro. Un abrazo.