Eres igual a ti, y desigual, lo mismo que los azules del cielo.

Juan Ramón Jiménez


lunes, 10 de marzo de 2014

PAREJA DE BAILE



Un pájaro demasiado grande
haciendo equilibrios sobre una rama
demasiado pequeña,
se balancean a uno y otro lado.
No podría decir quién marca el compás
si el peso del pájaro
o la liviandad de la rama.

14 comentarios:

Sandra Garrido dijo...

Así la vida. Frágil como una cuerda floja, nuestros pasos a veces son zancadas, otras pasitos leves y miedosos, así el amor, tan débil.Siempre tan reflexiva mi querida gallega

biquiños

Julio Alcalá Neches dijo...

La geometría lo determina todo en este caso.
Determinó el tamaño y la composición de la tierra.
Determinó la fuerza de la gravedad.
Determinó el peso del pájaro.
Determina que la rama sea poco resistente.
La ley natural a veces determina hasta el amor, aunque las apariencias engañen.

batalla de papel dijo...

una pareja que va buscando el equilibrio en la intuición del juego.
besos

lichazul dijo...

todo en equilibrio
hasta las paradojas

besitos

Amanecer Nocturno dijo...

Ay, qué amor de pájaro equilibrista.

Un abrazo, Vera.

Leo Mercado dijo...

Ves? Esto es poesía. No el uso de tal o cual palabra, sino más bien la manifestación de un fenómeno mundano, simple, bajo la óptica de la belleza suprema de tus palabras.

Anónimo dijo...

Bailan sincronizados. Causa y efecto.
Tu poesía es hermosa como se me ha hecho costumbre.

Darío dijo...

Seguro que hay un espacio intermedio entre rama y pájaro, seguro que gesta el equilibrio, seguro que se llama poema. UN abrazo.

alba dijo...

te sorprendería con qué facilidad los músicos de una orquesta transgredimos el ritmo del director, qué difícil es acompasarnos con la música que está en sus manos, y qué hermoso -es lo que pienso yo- cuando sucede, ese balanceo imperfecto.
te imagino en una ventana, viendo este instante de poema de bailar. :)
besos, vagalume

vaniaplate dijo...

Qué clima de haikú. Un solo detalle, un mundo.

lichazul dijo...

buen fin de semana VERA
abrazos energéticos
:D

el maquinista ciego dijo...

Cuántas veces me siento así, como un pájaro demasiado grande sobre una rama demasiado pequeña...o incluso al revés, como un pájaro diminuto danzando sobre la copa de un árbol inmenso....y en ninguno de los dos casos sabría tampoco decir quién lleva el ritmo (aunque sospecho que pocas veces soy yo ;))

Bicachaso, linda!!

fiorella dijo...

No es un haiku, pero tiene la simpleza y contemplación de uno. Me encantó. Un beso

mflorencia dijo...

hay que decirlo: me encantan tus poemas ♥