El poeta subió a un árbol
atándose con la cuerda de un verso
a una de sus ramas
y la intención de que en su pecho
creciese un pulmón de lluvia
-sueño de pájaros entre
sus cabellos-
Alguien vino y lo llamó loco
pero no se dolió el poeta
pues por fin algo sabía
acerca de lo infranqueable de aquel azul
sobre su cabeza
El poeta hizo un cuenco con sus manos
para darle piel
a un extraviado rayo de sol
Alguien vino y lo llamó indigente
tampoco se dolió en esta ocasión el poeta
pues ahora podría postular
acerca de la caridad de las sombras
El poeta se sentó sobre una piedra
cuando ya un nuevo día sesgaba la noche
Había recorrido un largo camino
alentado por su deseo de pronunciar el alba
Una niña de niebla
vino hasta él
y nada dijo
Antes de irse
depositó sobre la intemperie de su frente
el amparo de un beso
Llegado fue el momento en el que se dolió el poeta
pues comprendió que en ponerle voz
a aquel gesto de silencio
habría de gastar
hasta la última de sus palabras
19 comentarios:
En ocasiones, al poeta le hace falta el silencio, el barbecho de donde surgirán nuevas palabras.
Un abrazo, Vera.
Creo que la poesía es una alquimia dolorosa. A veces, es el único camino para que el alba se consume.
Bisous.
Aunque hay poetas y poetas, claro...éste me parece el Mesías de la poesía, y su cruz es el agotamiento de la palabra.
Un abrazo.
y si, como siempre, palabra fue la ultima palabra
Una niña de niebla, un espectro que llora como si fuese la niña-viuda del viento.
Leyéndote, he recordado estas palabras de Bolaño: "Un poeta lo puede soportar todo. Lo que equivale a decir que un hombre lo puede soportar todo. Pero no es verdad: son pocas las cosas que un hombre puede soportar. Soportar de verdad. Un poeta, en cambio, lo puede soportar todo. Con esta convicción crecimos. El primer enunciado es cierto, pero conduce a la ruina, a la locura, a la muerte." Te digo eso y que el final de tu poema (ponerle voz a aquel gesto de silencio...) me ha hecho sentir un temblor, no sé si en la boca o en los oídos.
Un abrazo, linda.
Suspiros ante el poeta...
un beso que lo alcanze y lo abrigue.
Y tantos a vos, que te hagan sonreír y jugar conmigo!
;)
vera, flotas y nos haces flotar con tus poesías.
gracias.
beso enorme
No quiero hablar del texto: quiero hablar de tu dulzura.
Puedo?
Otra vez te subiste al árbol donde crecen las palabras y devoraste a hurtadillas su fruto para saciar el hambre de los sin palabras.
Es tan hermoso lo que escribiste que no quiero agregar una palabra más.
Pero digo de nuevo: hermoso.
Tú logras poner palabras al silencio con una habilidad pasmosa.
No dejes de hacerlo nunca, Vera.
Un beso enorme!
Vera este poema es exquisito y me da la sensación que no te lo están reconociendo. es una preciosidad enhorabuena de verdad. un fuerte abrazo y bicos desde, ya en breve, el extranjero.
FELIZ CUMPLEAÑOS!!! perdoname Vera!!!
Es genial. Es tan bueno, que hasta que no he leído el penúltimo comentario, ni dudé que era de algún conocido. Es el segundo día que lo leo y me pierdo; no por no saber volver, sino porque quiero.
Leerlo es como cuando me montaba en la montaña rusa, acababa y corría otra vez a la cola.
No me gustan los finales felices, me gustan los finales que acaban bien!
"hasta la última de sus palabras"
sí.
agotar la palabra, hasta parir pájaros
abrazo, vera*
Que hermosa manera la tuya de arrancarle palabras al silencio.
Un abrazo
Hermoso el embeleso que causan tus palabras
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