Hoy, poemas con bocas
Se acunó
el filamento
de una estrella
en el eco de
tu risa
continuará su
luz centelleando
aun cuando la muerte
venga a buscarme
Palabras esquirladas de lo nunca dicho
se despedazan a su paso por la boca,
el brillo de tus ojos dictamina:
error hablar
cuando mirarse no basta
En vano corto el silencio con el filo de mi lengua
si el presente es ahogo
Me voy,
la voz suspendida en la arritmia del adiós
Empuñar un beso
como arma
tajar con sus alas
el espacio que media
amarse
a primera sangre
Tu boca es
la viva imagen de un pájaro
cuando intento apropiarme tu sonrisa
sale volando y se posa
sobre la rama más lejana
11 comentarios:
tus poemas Vera son tan amorosos que a veces huyo de comentarlos. Creo que ya te expliqué mi básica tesis. Estoy tan lejos del amor...
Pero el segundo poema me acerca a una dulzura escondida de mí misma.
Es precioso!
Pues entonces ya sirvió de algo escribirlo, querida...Besos, miles!
Me encanta el último, me encanta...
Deliciosamente cursi...
Versos geniales todos. Y cada uno de los poemas con su vida propia.
Me gustan mucho Vera!
Besos y se feliz!
(ultimo poema) oh ese pajaro. Te compro una gomera (resortera, honda, o como en tu lugar le llamen)
Partiste, Vera, diciendo "hoy, poemas con bocas".
Yo leí "hay poemas con bocas".
Y lo supe todo.
Bs.
Amarse a primera sangre... genial poema.! Abrazo!
Se me ocurre que "Amarse a primera sangre" podría ser el título de un manifiesto a la vida del amor.
Un abrazo, querida.
Hay una sabia contención en el último momento.
Ja! Me pasó exactamente lo mismo que Sarco. Será porque verdaderamente los hay.
Diminutamente hermosos.
Besos.
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